El que es fuerte ha de soportar la envidia y el odio. El valor de un hombre va aumentando mientras sea odiado .el prestigio engendra y nutre siempre el odio y la envidia ¿quien ha de ser más odiado que un hombre al que sonríe la suerte ? Suerte miserable y parca sería, aquella que despierta ningún odio? (G.von. Strassburg Tristán e Isolda)
GERANIO
Hace 22 horas
hoy entro sólo para darte las gracias, aprendo mucho con tu blog, me hace reflexionar
ResponderEliminarNo me interesa ser envidiado. Si fuera inteligente, me gustaría no hacer alardes para no molestar a quienes están por debajo; en cuanto a lo económico y con lo que está cayendo sólo me interesa tener un pasar.
ResponderEliminarBesos
Claro y a mi tampoco. Pero es una realidad que la envidia ha hecho y hace estragos y daña al que la padece. Porque la envidia suele generar la calumnia y ante esto no hay defensa posible. Me gustan mucho tus comentarios . Muchas gracias
ResponderEliminarLo peor de la envidia es que casi siempre levanta la calumnia para desprestigiar y hundir al que envidia. El envidioso nunca es feliz porque jamás se ve harto de poseer lo que tiene el otro
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