sábado, 14 de septiembre de 2013

Bienes monacales




Tú ,oh celda solitaria, eres el maravilloso taller de trabajo espiritual en el que el alma humana restaura su semejanza con el creador y retorna a la prístina pureza, donde los embotados sentidos reconquistan su perspicacia y sutileza, y las naturalezas corrompidas se renuevan en sinceridad por el pan ázimo. (Pedro Damiano.) 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Los comentarios siempre amplían conocimientos. Muchas gracias.