Las pesadillas. Se estaba convencido de que las originaban los elfos, que se montaban sobre los durmientes como si éstos fuesen yeguas. La persona aquejada de estas pesadillas no se puede mover, ni puede gritar (porque si pudiera se liberaría de los elfos), le domina la agitación y la sensación de que una gran fuerza le oprime. En la Edad Media, los hombres tenían procedimientos para alejarlos, que consistían en colocar ciertas plantas como la Palma de Cristo o la hierba de San Juan en todo el dormitorio. Además, se colocaban amuletos, diamantes, coral, jaspes y sangre menstrual seca.
Otro abrazo que se hace real
Hace 2 días
¡pero qué curioso, y cómo cambian las cosas al paso de los siglos! pensaba que eran los íncubos y súcubos quienes atormentaban a los durmientes, y no los elfos, que hoy veo más a través de los ojos de Tolkien, como entidades benéficas
ResponderEliminarbesos,
En este caso concreto estamos hablando de las pesadillas no de relaciones- El incubo es un demonio masculino que yace con una mujer y el sucubo es el demonio femenino que yace con un hombre. En el caso de los elfos no hay más que oprimir y angustiar para crear pesadillas. Muchas gracias
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