domingo, 26 de enero de 2014

Alegría monacal



Soy monje profeso del Cister. Y fui enviado a otro lugar por el abad del Cister, en paz, sin discordia y sin escándalo. ¡ Qué bueno es expresar en silencio al Señor! En el silencio y la esperanza reside vuestra fortaleza

4 comentarios:

  1. Sin el silencio no hay medio de escuchar a Dios. Tal vez por eso dice en el Deuteronomio: "Shemá (escucha) Israel..." y lo proclama como el primero de los mandamiento. Para escuchar hay que hacer silencia.

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  2. Que profundo eres Paco, pero es verdad las cosas importantes sólo se pueden escuchar en el silencio porque nos permite estar con nosotros mismo. Muchas gracias.

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  3. el silencio y la esperanza requieren de una inmensa fortaleza, no sólo los monjes hacen acopio de ella

    besos,

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    1. Hoy lo más difícil es escuchar el silencio y por supuesto esfuerzo requiere la esperanza, y hay que luchar por ella porque con la pérdida de la esperanza perdemos una parte importante de nuestra vida.

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Los comentarios siempre amplían conocimientos. Muchas gracias.