lunes, 3 de marzo de 2014

Santa Maria de las dueñas. Preguntas

Llegados al Monasterio, descabalgaron de sus caballos y vestidos con  todos los atributos de su autoridad, penetraron en él. No encontraron unas religiosas asustadas, no. En el claustro, las religiosas habían colocado los mejores asientos para sus visitantes y jueces: el obispo  en el centro, los dos abades uno a cada lado. Las monjas estaban allí todas frente a estas autoridades. A la izquierda, quizá, las monjas rebeldes y culpables con la mirada alta y desafiante, a la derecha las  monjas obedientes con aire sumiso y los ojos bajos, entre ellas la priora María Martínez, la gran baza del obispo don Suero. La priora nombrada por él para poner fin a los escándalos que se estaban produciendo en el convento.

El proceso se iniciaba y a decir verdad Don Suero tenía temor de las preguntas que pensaba formular, pero si quería llegar al fondo de la cuestión había que hacerlas .
Se dirigió a doña María, la subpriora.
- Hermana :¿es cierto que algunas de las religiosas de este convento desobedeciendo las normas del mismo, permanecen fuera de él ?
- Sí, algunas lo hacen e incluso han llegado de noche, como Sor Estefanía, con cartas que le han dado los dominicos.
Don Suero se dirige con calma y frialdad a Sor Estefanía, la cual al oír su nombre se ha levantado. Allí está, erguida frente al obispo sin bajar la vista, ¡que mujer tan soberbia ! No nos teme, ha pensado el obispo.

2 comentarios:

  1. Sólo es el aperitivo, ni siquiera sabemos nada del nudo y habrá que esperar al desenlace.
    Un beso

    ResponderEliminar

Los comentarios siempre amplían conocimientos. Muchas gracias.