Marozia (S.X)

Miembro muy influyente de una de las familias más poderosas, la de Teophilacto en Roma. Teododora la joven y Marozia su hermana. se educaron en ese ambiente de poder, de intriga, que lo fueron todo desde el punto de vista de su influencia y de su educación. Eran conocedoras de todas las ambiciones y de todos los resortes del poder y en qué campos debían moverse. Marozia¿ empleó las dotes de seducción con el Papa o fue éste el que la sedujo? ¿Son los hechos reales o son fruto de la leyenda?. Suponiendo que esto sea producto de la leyenda lo que se quiere significar por encima de todo es un hecho: la depravación de esta mujer y a su vez la degeneración de los cargos papales. Marozia  Casó tres veces. Sus maridos fueron Alberico de Espoleto, Guido de Toscana y Hugo de Provenza. Se dice que amén de estos matrimonios   tuvo muchos asuntos amorosos donde se demuestra, una vez más lo que ya señalé anteriormente, la mujer era también infiel. Sabemos que Marozia y Alberico establecieron un poder muy duro y fuerte en Roma, tanto que el papa no estaba dispuesto a que, ellos alcanzaran  ese dominio que casi relegaba a la autoridad pontificia a mínimos. Frente a esto hechos reales e históricos se maneja también la leyenda, una leyenda que en su base lo que pretende es  aportar el dato real y cierto del poder de Marozia. Según ésta Alberico habría sido un  instrumento en sus manos lo que se percibiría cuando éste quiso imponer el control en Roma, y tan pronto como lo intentó fue asesinado. Una vez viuda Marozia casó con Guido, marqués de Toscana, el objetivo de Marozia en un principio y  del matrimonio después, era dominar al Papa, pero Juan X no era un papa débil, ni mucho menos, así que no estaba dispuesto a tolerar que nadie se colocara por encima de su poder. El deseo del papa limitaba las ambiciones de la pareja y por lo tanto decidieron asesinarle lo que hicieron ahogándole con una almohada en su propio castillo. No sabemos nada más sobre este hecho, pero sí los resultados.  Marozia, desde este momento fue la dueña de la situación en Roma y téngase en cuenta que le atribuyo el poder a ella sola, que no tengo en cuenta a su marido, porque ella era la que manejaba las designaciones papales  León VI ( mayo- diciembre  de 928) Esteban VII (929-931) y Juan XI(929-931) hijo de ella, fueron  papas que le debieron sus nombramientos.

  Papas hechos por ella, ella reinaba en Roma, se aposentaba en el castillo de Santángelo, sin encontrar ningún tipo de oposición a ese dominio que ejercía.. Mujer ambiciosa, viuda de su segundo marido decide casarse con otro viudo, Hugo de Provenza, reinante en el Norte de Italia, ¡qué buen matrimonio para dominar esa parte de Italia! y además jugaba con otra posibilidad. Siendo su hijo el Papa Juan XI, él podía coronar a su marido emperador y así ella sería la emperatriz. Todo se preparó para la ceremonia,  la meta a punto estuvo de conseguirse. El acto  se celebró en el castillo de Santángelo, pero allí en la sombra estaba el hijo habido de su primer matrimonio, que no aceptaba ese tercer matrimonio y allí mismo Alberico se sublevó, provocando la huida del tercer esposo, y ¿Marozia?. Tuvo un final triste, encarcelada por su hijo Alberico en el castillo de Santángelo, No sabemos cuánto tiempo estuvo prisionera, pero si  que con  sesenta años  su nieto, que accedía a la sede pontificia con el nombre de Juan XII la sacaba de la prisión.

La leyenda se ha encargado de hacer de Marozia una mujer que estaba dominada por los demonios, que fue exorcizada y excomulgada por breve tiempo. Fue ejecutada en el año 986. Mujer poderosa, culta, ambiciosa que marcó una época de la historia y que se escapa de ese modelo que se traza sobre como debía comportarse la mujer. Ella no fe una mujer  anulada, ni débil sino todo los contrario.